A las siete de la tarde de ayer agentes de la Ertzaintza que patrullaban por Berango observaron la presencia de un vehículo que circulaba con una matrícula que no forma parte de la matriculación general, por lo que lo interceptaron en la Avenida Sabino Arana. Tras consultar en los archivos informáticos de la Ertzaintza, los agentes comprobaron que la matrícula había sido falsificada, así como que el vehículo no tenía seguro obligatorio ni la inspección técnica efectuada.
Ante estos hechos, los agentes procedieron a la detención del conductor y, tras realizar las diligencias pertinentes en dependencias policiales fue puesto en libertad con la obligación de presentarse ante la autoridad judicial cuando sea requerido.
